martes, 13 de junio de 2017

La barraca - Vicente Blasco Ibáñez


Título: La barraca 
Autor: Vicente Blasco Ibáñez
 
Páginas: 232

Editorial: Cátedral
 
Precio: 10,75 euros
 


Año de edicion: 2004

La vida de Blasco Ibáñez parece una novela en sí misma, cuajada de episodios novelescos, y el origen de esta novela es uno de ellos. En marzo de 1896, huyendo de la policía después de un enfrentamiento entre la muchedubre y las fuerzas del orden, se refugió en una taberna del barrio valenciano de El Cabañal. Allí, para distraerse en su encierro y mientras las cosas se calmaban en la calle, escribió un relato corto titulado «Venganza moruna», que dos años más tarde ampliaría para dar lugar a «La barraca», una de las mejores novelas de la época.

Publicada originalmente en 1898 por entregas, es una de las grandes obras del realismo social español, en la que se entrecruzan dos grandes temas, que en el fondo son el mismo: el drama de la explotación opresiva que sufría el honrado campesino que cultivaba la huerta sometido al ocioso y despiadado terrateniente de la ciudad, y el atraso de las clases populares de aquellos años. El autor conoció de cerca las condiciones de trabajo de los huertanos, que sufrieron una sequía extrema entre 1875 y 1879, durante la que perdieron las cosechas y se rebelaron contra los arrendatarios que exigian sin piedad el pago de la renta.

Como telón de fondo, se describe en detalle el funcionamiento del centenario Tribunal de las Aguas de Valencia, que celebra sesiones al menos desde el año 960, y la vida cotidiana en la fértil huerta levantina.

El Tribunal de las Aguas de Valencia

En ese contexto, se desarrolla una trama novelesca en forma de terrible tragedia, que avanza inexorablemente como la maquinaria de un reloj hasta el tremendo desenlace final. Denuncia social, realismo, toques costumbristas, reproducción del lenguaje popular y un notable dominio del lenguaje, con interludios llenos de ritmo y musicalidad, que hace que todo parezca natural son los principales ingredientes de esta novela.

Un clásico escrito en diez capítulos muy equilibrados, en los que las descripciones están al servicio y contribuyen al desarrollo de las situaciones dramáticas. Una gran novela, de estructura armoniosa como una sinfonía, dinámica y potente, a la vez realista y poética cuando describe la huerta y la naturaleza. Un libro estupendo de un autor muy notable, bastante olvidado hoy en día.

Vicente Blasco Ibáñez (Valencia, 1867-1928) fué un político, periodista y escritor español, hijo de aragoneses, famosísimo a principios del siglo XX y hoy bastante olvidado. Lector precoz y voraz, de niño leyó «Los miserables» de Víctor Hugo y decidió ser escritor. Tener lazos familiares con el editor Cabrerizo le resultó muy útil. Estudió Derecho en la Universidad de Valencia, pero nunca llegó a ejercer.

Se hizo revolucionario, masón, anticlerical y descubrió que como orador era un superdotado. En una época en la que los políticos temían a las masas, él las manejaba con facilidad. Era extrovertido, simpático y campechano. Fué diputado durante siete legislaturas, periodista incansable desde los dieciséis años y novelista de éxito. También estuvo encarcelado tres veces por antisistema, revolucionario radical y agitador.

Decidió ser un autor vendido en todo el mundo y se convirtió en el primer escritor de superventas global, con «Los cuatro jinetes del Apocalipsis», con cuyas ventas se hizo rico y famoso en los cinco continentes. Vivió en Argentina, México y en la Costa Azul, donde se compró una preciosa villa.

Desempeñó un papel destacado en la oposición en el exilio a la primera dictadura de Primo de Rivera y escribió un famoso alegato en su contra, «Una nación amordazada». Es uno de nuestros escritores realistas más importantes y prolíficos del cambio de siglo entre el s. XIX y el XX.

Vicente Blasco Ibáñez

Publicado por Antonio F. Rodríguez. 

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