domingo, 29 de diciembre de 2013

Nicolas Muller - Nicolas Muller


Título: Nicolas Muller 
Autor: Nicolas Muller

Páginas: 98
 

Editorial: La Fábrica

Precio: 12,50 euros 

Año de edición: 2013

Este librito que acaba de publicarse en la colección PHotoBolsillo es una cuidada selección de los trabajos de Nicolas Muller, un excelente fotógrafo judío de origen húngaro que, en un peregrinaje al que le empujó la expansión de la Alemania nazi en Europa, acabó instalándose en España y fotografiando a un buen número de personajes famosos. Muchas de las fotografías que recordamos cuando pensamos en la imagen de grandes escritores españoles del siglo XX son suyas.

Afortunadamente, la aparición de este libro ha coincidido con una magnífica exposición antológica de lo mejor de su obra, organizada con motivo de cumplirse el centenario de su nacimiento, en la sala del antiguo depósito de agua del Canal de Isabel II, en la calle Santa Engracia nº 125 de Madrid. Estará abierta hasta mayo del año 2015 y os recomiendo a todos los que podáis que no dejéis de ir. Tanto la sala como la muestra merecen mucho la pena.

En ella se resume a través de 125 fotografías la trayectoria de este gran fotógrafo. Comenzó a hacer fotografía social en Hungría, impactado porque los pobres campesinos tenían que pedir réstamos a los bancos para comprar material sobre un precio esperado del cereal, que luego cuando bajaba les dejaba en la miseria y les hacía perder sus tierras.

Campesino húngaro

El nazismo le empujó a París y Marsella, donde retrató las clases más bajas y desfavorecidas de la sociedad.

Descargadores del puerto de Marsella

Luego huyó a Oporto y fotografió a las mujeres que llevaban fardos inverosímiles encima de un rodete sobre la cabeza, mientras sus maridos jugaban a las cartas en el bar.

Mujeres descargando un barco en Oporto

La siguiente parada de su particular periplo por países mediterráneos fué Tánger, donde quedó fascinado por el exotismo y la belleza que se le ofrecía a su objetivo.

 
Tánger (1942)

Finalmente llegó a España en los años 50 y levantó acta de un país carpetovetónico, católico, rancio y algo atrasado, sumido en la dictadura franquista.

Semana Santa en Cuenca

Campesinos en Campo de Criptana

Casa de Campo (Madrid)

La exposición se completa con un documental de una hora de duración en el que el propio Nicolas Muller habla sobre su vida y su peripecia vital. El hombre, profundamente modesto, recuerda en él al viejo refrán que dice que «En el país de los ciegos, el tuerto es el rey», para añadir que en el panorama de la fotografía española de aquellos años, él era el tuerto. Pero no es cierto, Fué un gran profesional y un artista de mucho nivel. No hay más que pasarse por la sala del Depósito del Canal para comprobarlo.

Nicolas Muller (Orosháza, 1913-2000) fué un fotógrafo húngaro de origen judio, que recorrió unos cuantos países huyendo de la locura nazi. Estudió Derecho y Ciencias políticas, pero prefirió dedicarse a la fotografía. En su Hungría natal hizo fotografía social, retratando la vida de los campesinos paupérrimos. 

Luego viajó a París, donde conoció a los fotógrafos Robert Cappa, Brasai, André Kertész y Moholy-Nagy, y también a Picasso, Hemingway y a buena parte de los artistas de la época. Al estallar la Segunda Guerra Mundial, huyó a Oporto (Portugal) y luego a Tánger, donde le protege un familiar de Ortega y Gasset. De allí viajó a España y se convirtió en el fotógrafo de intelectuales y escritores. Retrató a Azorín, Dionisio Ridruejo, Cela, Baroja, Miró...

Ortega y Gasset dijo de él que era el fotógrafo que había domesticado la luz.

Nicolas Muller

Publicado por Antonio F. Rodríguez.

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