jueves, 20 de diciembre de 2012

El hobbit - J. R. R. Tolkien


Título: El hobbit
Autor: J. R. R. Tolkien

Páginas: 288

Editorial: Minotauro

Precio: 20,95 euros


Año de Edición: 2002 

Ahora que se ha estrenado la versión cinematográfica de «El hobbit», puede ser un buen momento para leer el libro, bueno, si es que no lo habéis leído todavía. Es una delicia de novela, bien escrita, muy sólida, con una creatividad desbordante que levanta todo un mundo con países, etnias, mitos, historia y todo tipo de detalles. Un derroche de fantasía con el armazón dramático de los clásicos, con la fuerza de los grandes temas épicos de Tolkien: el poder, la ambición, el valor, la guerra y la muerte. Un gran libro que no debéis dejar pasar.

Nació como una obra de literatura infantil, pero creo que el resultado trasciende esa intención, y más bien se trata de un libro de aventuras con forma de novela de fantasía, situada en la Tierra Media, con una riqueza de matices y detalles apabullante. Una gozada de libro para todo tipo de lectores, que seguro que os encantará. La novela ha servido a Peter Jackson para rodar tres películas de unas tres horas cada una y la verdad es que, por lo menos la primera no decepciona en absoluto y es muy recomendable. En fin que nos os perdáis ni el libro ni la peli. 


El Anillo Único, alrededor del que gira el universo literario de Tolkien

John Ronald Reulen Tolkien (Sudáfrica, 1892-1973) nació en el continente africano y allí le picó una tarántula siendo muy niño. Su familia, que era británica de origen aleman, regresó a Inglaterra cuando él tenía tres años. Estudió Filología Inglesa en Oxford, luchó en la Primera Guerra Mudial, trabajó en el «Oxford English Dictionary» y se hizo profesor en la Universidad de Leeds y luego en la de Oxford, en donde llegó a ser un gran especialista en literatura medieval. Allí se  hizo amigo de otro gran escritor de libros de fantasía, C. S. Lewis, autor de «Las crónicas de Narnia».

J. R. R. Tolkien en 1916

Tolkien llevaba años, desde su adolescencia, escribiendo relatos míticos de fantasía, entre otras cosas porque pensaba que el Reino Unido necesitaba una mitologia similar a la griega. Pero tuvo que ser C. S. Lewis quien le convenciera en 1937 de que publicase «El hobbit», escrito inicialmente para sus hijos. Años más tarde, entre 1954 y 1955 publicó «El señor de los anillos» en tres tomos, en principio una secuela del hobbit que fué creciendo, enriqueciendose y evolucionando a lo largo de más de diez años, con el apoyo y ayuda de C. S. Lewis y el círculo de estudiosos que se formó a su alrededor.

Nuestro autor sabía inglés, francés, alemán, latín, noruego, español, belga...así hasta más de 20 idiomas. Pronto desarrolló el vicio de crear idiomas artificiales, combinando creativamente elementos de varios idiomas, y así generó el quenya, el sindarin, el adunaico, entro otros, y los utilizo en su saga mítica.

Era profundamente católico, se quedó muy decepcionado con las reformas introducidas por el Concilio Vaticano II, bastante conservador, apoyó la dictadura de Franco, era partidario del apaciguamiento ante HItler y le preocupaba más el avance del comunismo soviético. Sin embargo siempre criticó duramente la doctrina racial nazi y su antisemitismo. Mantuvo posturas paficistas, ecologistas y nunca le gustaron los automóviles, prefería usar su bicicleta.

Tolkien es un clásico de las sagas de fantasía, el pionero y la figura indiscutible, y la verdad, vuendo fotos de sus últimos años, se tiene la impresión de que poco a poco su aspecto físico fué transformandose hasta parecer un auténtico hobbit.

 
J. R. R. Tolkien

Publicadopor Antonio F. Rodríguez.

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